Más que para darse un baño, la playa es más apta para la practica del surfing. Es una playa profunda de oleajes fuertes por lo que no se recomienda para niños pequeños, ni adultos distraídos.
Cada año esta playa es visitada por los amantes de las olas radicales y la convivencia con la naturaleza.
En ciertas temporadas del año se dan avistamientos de ballenas (desde la orilla de la playa) y también se puede participar y observar el milagroso desove de diferentes especies de tortugas marinas.
Tanto propios como extraños encuentran en esta playa un lugar de sano esparcimiento y convivencia familiar.
